martes, 4 de septiembre de 2012

Ángeles Caídos I: Veinte

-Lali – dijo Pablo, cuando se apareció al día siguiente en mi casa – has estado causándome un montón de problemas últimamente – sentí el olor a alcohol en su boca
-¿Qué estás haciendo aquí?
-¿Qué te parece que estoy haciendo? Quiero hablar. ¿Puedo entrar?
-Mi mamá está durmiendo. No quiero despertarla
-Nunca conocí a tu madre – algo en su voz hizo que se me erizara la piel
-Lo siento, ¿necesitas algo? – sonrió
-¿No te gusto, verdad? – crucé mis brazos por encima de mi pecho, a modo de respuesta – Ouch. Estoy aquí, Lali. Quiero que sepas que estoy haciendo un gran esfuerzo para convencerte que soy un chico común y que puedes confiar en mí
-Escucha Pablo, tengo un par de cosas que hacer y…

Golpeó sus nudillos contra el marco de la puerta.

-¡No he terminado! – gritó, antes de darse cuenta de lo que había hecho – Diez dólares a que me voy a arrepentir de esto

Estaba pensando en cerrarle la puerta en la cara, cuando él se quitó sus lentes de sol, revelando sus ojos inyectados de sangre.

-Vine aquí porque quería decirte que Jaime está bajo mucho estrés por el colegio. Exámenes, aplicación de becas, y demás cosas. No está actuando cómo verdaderamente es. Necesita escapar un rato de todo eso. Los cuatro – Jaime, Cande, tú y yo – deberíamos ir a acampar por vacaciones de primavera. Irnos mañana y volver el martes por la tarde
-Lo siento, ya tengo planes
-Déjame cambiar tu opinión. Planearé todo el viaje, conseguiré las carpas, la comida. Te enseñaré lo buen chico que soy. Te mostraré lo que es pasar un buen rato
-Creo que deberías irte
-Respuesta equivocada – dijo, inclinándose

Un frío recorrió mi cuerpo y sentí que él realmente había asesinado a la chica de su antiguo colegio. Sus ojos tenían algo siniestro, como si estuviera a punto de matar a alguien.

-Vete o llamaré a la policía – dije

Pablo abrió de golpe la puerta, me cogió de la blusa y me jaló hacia afuera. Luego me golpeó contra la pared, colocando su cuerpo encima del mío.

-Vas a venir a acampar quieras o no
-¡Aléjate de mí! – dije, intentando zafar
-¿O qué? ¿Qué vas a hacer?

Me tenía por los hombros y me golpeó contra la pared.

-Llamaré a la policía – no sabía qué más decir
-¿Vas a gritar por ellos? No te pueden escuchar. La única manera en que te deje libre es que vayas a acampar
-¿Lali?

Pablo y yo volteamos, hacia donde provenía la voz de mi madre. Pablo mantuvo un momento más sus manos en mi cuerpo, luego hizo un sonido de disgusto y se apartó. A mitad de camino se volteó.

-Esto no ha terminado

Corrí hacia adentro y cerré la puerta con llave. Golpeé mi espalda contra la puerta y me senté en el suelo, resistiendo las ganas de llorar. Mi madre apareció en lo alto de las escaleras.

-¿Lali? ¿Qué sucede? ¿Quién estaba en la puerta?
-Un chico del colegio – dije como pude – él quería mis notas de Hamlet – mentí – la semana pasada intentó copiarse de mí, aparentemente lo está convirtiendo en un hábito
-Oh, mi amor. Ahora entiendo porqué estás triste. Puedo llamar a sus padres sí deseas
-No, está bien
-Entonces haré el desayuno – dijo, antes de irse

Apenas se fue, subí a mi habitación y mientras buscaba qué ponerme, sonó mi celular.

-¿Te enteraste? ¡Los cuatro iremos de campamento! – dijo Cande
-Cande – dije, mi voz temblando – Pablo está planeando algo. Algo peligroso. La única razón por la que él quiere ir a acampar es para que estemos solas. No vamos a ir
-¿Qué estás diciendo? ¿Es un chiste, verdad? Digo, finalmente vamos a hacer algo excitante por las vacaciones y tú dices que no? Sabes que mi mamá no me va a dejar ir sola. Haré lo que sea, en serio. Vamos, Lali….
-Pablo vino a casa hace quince minutos, borracho. Él me amenazó físicamente
-¿Qué quieres decir con amenazar físicamente?
-Me jaló fuera de la casa y me golpeó contra la pared
-¿Pero estaba borracho, verdad?
-¿Importa? – demandé
-Bueno, está lidiando con muchas cosas. Digo, se equivocaron al acusarlo de estar involucrado en el suicido de una chica. Si te hirió – y no es que esté justificando lo que hizo – tal vez él sólo necesite…que alguien lo aconseje…
-¿Si me hirió?
-Estaba borracho. Tal vez…tal vez no sabía lo que hacía. Mañana se va a sentir horrible – abrí mi boca y me callé, no podía creer que Cande lo estuviera defendiendo
-Tengo que irme – dije, cortadamente – te hablaré más tarde
-¿Puedo ser completamente honesta? Sé que estás preocupada por este chico de la máscara. No me odies, pero creo que la única razón por la que quieres culpar a Pablo es porque quieres negar que sea Peter. Estás racionalizando todo, y me estás volviendo loca
-¿Racionalizar? Peter no se apareció en mi puerta esta mañana y me golpeó contra la pared
-¿Sabes qué? No debí hablar de ello. Sólo dejémoslo, ¿está bien?
-Está bien – dije, enojada


***

¿Ya te enteraste del concurso?

2 comentarios:

  1. Pablo es muy raro!! Creo q de alguna forma esta relacionado con peter, pero peter viene en su ayuda, aunque genera dudas más!!

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  2. mee carga pabloo re enfermo sicopattaaaaa xD
    sube mas :D

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