lunes, 14 de mayo de 2012

El Designio del Ángel: Cinco

Bozo

Thiago y yo sólo somos compañeros en una clase, así que llamar su atención no es tarea fácil. Todos los días en Historia Británica intento escoger un sitio para estar cerca de él. Y en el lapso de dos semanas, él se ha sentado a mi lado. Le sonrío y le digo hola. Él me sonríe y me pregunta cómo estoy. Luego abre su cuaderno o saca su celular por debajo de la mesa, por lo que nuestra conversación termina. No actúa de forma descortés ni nada parecido; simplemente no parece estar del todo interesado en conocerme. ¿Y, por qué debería estarlo? Él no tiene ni idea del futuro que nos espera.

Así que durante una hora al día lo observo en secreto, tratando de memorizar todo cuanto puedo. Le gusta llevar la camisa abrochada y arremangada hasta los codos, y el mismo modelo de jeans en tonos distintos. Utiliza cuadernos de papel reciclado y escribe con un lapicero verde. Es inteligente, modesto y divertido. Le gustan las pastillas de menta. Se encuentra con Luna cada día a la salida de la clase. De modo que sólo dispongo de los preciosos minutos previos a la clase, y hasta el momento nada de lo que he hecho ha obtenido una respuesta significativa por parte de él. Pero mañana es el día de las camisetas. Necesito una que inicie una conversación.

- No te estreses – dice Cande mientras hago un desfile de camisetas

Está sentada en el suelo de mi habitación, las piernas recogidas, la viva imagen de una buena amiga asesorando en cuestiones de moda.

- ¿Qué tal una de un grupo? – pregunto y le enseño una negra de una gira de las Spice Girls
- Esa no
- ¿Por qué?
- Hazme caso

Le enseño una camiseta rosada que dice: el mundo adora a una chica de california. Cande se burla.

- Creo que mi hermano tiene pensado ponerse una camiseta que dice: vuelve a california
- Imbécil. ¿Qué problema tiene con California? – Cande se encoge de hombros
- Es una larga historia. En resumen, mi abuelo era el dueño del Lazy Dog Ranch, y ahora está en manos de gente rica de California. Mis padres sólo lo dirigen y mi hermano está furioso. Además, tú insultaste a su Bluebell
- ¿Bluebell?
- Aquí no puedes faltarle el respeto a la camioneta de un hombre sin sufrir consecuencias – río
- Bueno, ya debería haberlo olvidado. Ayer intentó humillarme en la clase de Historia Británica. Estaba concentrada, tomando apuntes como una buena chica, cuando de la nada Peter levanta la mano y me acusa de ser una bruja
- No me extraña viniendo de él – reconoce Cande
- No puedo creer que compartieras útero con él – sonríe
- Hay momentos en los que yo tampoco me lo creo – dice – pero es un buen chico, sólo que a veces lo esconde

A la mañana siguiente, Stefano entra en la cocina con una camiseta que dice: si los idiotas pueden volar, este sitio sería un aeropuerto. Sé que en el colegio a todos les parecerá divertido y nadie se ofenderá, porque él cae bien a la gente. Así de simple son las cosas con él. Cande llega con una camiseta en la que se lee: los caballos se comieron mis deberes. Finalmente yo fui con una camiseta con una imagen de Elvis y una frase de una de sus canciones.

Me sorprende que Luna no haya ido aquel día, seguramente se quedó pensando toda la mañana en qué camiseta ponerse, la que combinaba mejor con su ropa. Así que aprovecho para estar pendiente de Thiago y ver si esta vez me puedo acercar a él. Por primera vez, no almuerzo en la cafetería y sigo, sin que se dé cuenta, a Thiago hasta un restaurante de pizzas. Planeo hablarle, haciéndome la sorprendida por verlo ahí; pero cuando llego, el lugar está repleto. Lo localizo en el fondo, apretujado en una mesa circular junto a otras cinco personas. Sin duda alguna no hay sitio para mí y no hay manera de que me dé un paseo casual por el restaurante sin poner evidencia de un modo patético de mis intenciones.

Encuentro una mesita en un rincón, al otro lado del salón de juegos. Elijo la silla que está de espaldas a Thiago y sus amigos para que no puedan verme la cara, aunque estoy segura de que si alguno de ellos me dirige más de una mirada curiosa, reconocerá mi pelo. Mientras espero a que alguien venga a tomarme el pedido, Thiago y dos de sus amigos se levantan y corren al salón de juegos como niños que salen al recreo. Decido que es momento de aprovechar la situación para conversar.

- Oye – dice uno de ellos, mientras me pongo de pie para acercarme - ¿esa no es Bozo?
- ¿Qué? – pregunta Thiago - ¿Quién es Bozo?
- Ya sabes, la chica nueva. La de California

Tardo un buen rato en comprender que está hablando de mí. A veces es una mierda tener un oído sobrenatural.

- No te quita los ojos de encima – dice su amigo

Aparto la vista de inmediato, mientras el nombre que acabo de oír me cae en el estómago como una piedra. Bozo. Como el payaso.

- Tiene ojos saltones, ¿no? Como una lechuza – dice el otro chico – cuidado Bedoya, quizás te está rondando. La chica está muy buena, pero es de las que desprenden vibraciones malísimas. Es penoso, ¿no crees? – su amigo ríe a carcajadas
- Bozo el Penoso. Es la mejor burla que he oído en mi vida

Sé que no intenta ser cruel conmigo; supone, como es normal, que no puedo escucharlo desde el otro lado del bullicioso restaurante. Pero escucho sus palabras como si estuviera hablando por un micrófono. Una ráfaga de calor me recorre el cuerpo desde la cabeza hasta los pies. Se me revuelve el estómago. Tengo que salir de aquí rápido, porque si no voy a vomitar o ponerme a llorar. 

2 comentarios:

  1. Pobre mar todo lo q le dicen, ahora peter q papel viene a hacer? pq los principales son mar y thiago no? Aparece alguna lali?

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  2. Sólo para que no hayan dudas: los protagonistas son los tres, Mar, Thiago y Peter. Lo que sucede es que Mar se va a enamorar de Peter también..... :) Esta saga aún no está terminada, me parece que son tres libros y el último aún no sale, así que cuando termine de subir el segundo, daré una pequeña explicación de por qué los dos protagonistas son Thiago y Peter. Espero me hayas entendido :)

    Gracias por comentar siempre vale!

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